Gobierno argentino anuncia aumento escalonado de impuestos a los combustibles

El litro de nafta y gasoil experimentará incrementos a partir del 1° de junio

El gobierno argentino ha dado a conocer un aumento gradual en los impuestos sobre el combustible líquido (ICL) y el dióxido de carbono (IDC), lo que tendrá como consecuencia un incremento en el precio del litro de nafta y gasoil a partir del próximo sábado 1° de junio.

Este aumento, que originalmente estaba programado para mayo pero fue pospuesto, se aplicará de manera escalonada durante el mes de junio, según lo establecido por el decreto 466 publicado en el Boletín Oficial. El nuevo cronograma dispuesto por el gobierno establece que entre el 1 y el 30 de junio se aplicarán los incrementos correspondientes al cuarto trimestre de 2023 y al primer trimestre del presente año.

Según las nuevas disposiciones, se espera que el precio del litro de nafta súper aumente en $177,84 sobre los valores actuales, mientras que el gasoil podría experimentar un incremento de $121,01. Esto representa un alza del 20,44% y 11,26% respectivamente, lo que podría impactar significativamente en el bolsillo de los consumidores.

Es importante recordar que el impuesto a los combustibles fue instaurado mediante la ley 23.966 en 1998, con el objetivo de financiar fondos destinados a viviendas e infraestructura en todo el país. Este gravamen impone montos fijos que se ajustan cada tres meses en función del índice de inflación, y su aumento actual busca cubrir las necesidades financieras del gobierno en medio de un contexto económico desafiante.

La medida ha generado diversas opiniones entre la población y expertos, algunos argumentan que podría impactar negativamente en el poder adquisitivo de los ciudadanos y en los costos de transporte y producción, mientras que otros sostienen que es necesaria para garantizar el financiamiento de proyectos vitales para el desarrollo del país.

Se espera que en los próximos días se generen más debates y discusiones en torno a este tema, mientras los argentinos se preparan para enfrentar un nuevo aumento en el costo de los combustibles.

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