Presupuesto 2025: el Gobierno proyecta crecimiento y equilibrio fiscal tras una década de déficits
El Gobierno Nacional presentó los lineamientos generales del Presupuesto 2025, destacando un crecimiento económico del 5% del PIB y la ambición de mantener el equilibrio fiscal, algo no visto desde hace más de una década. Este presupuesto refleja el compromiso de la actual gestión con la estabilidad económica y la contención del gasto público, en un contexto en el que el déficit fiscal ha sido uno de los grandes desafíos.
Proyecciones económicas optimistas
Entre las principales proyecciones macroeconómicas, el Ejecutivo prevé que el Producto Interno Bruto (PIB) crecerá un 5,0% en 2025, una tendencia que se espera continúe en 2026 (+5,0%) y 2027 (+5,5%). Además, se proyecta que el tipo de cambio alcance los $1.207 por dólar para diciembre de 2025, con una inflación que bajará al 18,3% interanual para el mismo período.
El presupuesto también estima un superávit primario del 1,3% del PIB, lo que representa un hito significativo considerando que desde 2010 no se ha logrado un resultado fiscal superavitario anual, y desde 2008 no se alcanzan dos años consecutivos de superávit financiero.
La senda del equilibrio fiscal
El déficit fiscal ha sido uno de los temas más preocupantes para el país en los últimos años, alcanzando niveles críticos en noviembre de 2023, cuando el déficit consolidado del Banco Central y el Tesoro Nacional superaba el 15% del PIB. Sin embargo, el gobierno actual ha hecho del equilibrio fiscal una de sus principales metas. Para julio de 2024, se logró un superávit primario acumulado del 1,4% del PIB y un superávit financiero del 0,4%, lo que representa un cambio radical frente a los déficits anteriores.
Este esfuerzo por contener el gasto público incluyó la eliminación de erogaciones improcedentes y un enfoque claro en las prioridades de la gestión, como el acompañamiento social, la recuperación de las capacidades en seguridad y defensa, y la modernización del Estado.
Acompañamiento social y seguridad como pilares
Uno de los ejes fundamentales de la política pública de esta gestión ha sido el fortalecimiento de los programas de asistencia social. Desde diciembre de 2023, el monto de la Asignación Universal por Hijo (AUH) y la Asignación Universal por Embarazo se incrementó en un 374%, muy por encima de la inflación acumulada de 144%. Este ajuste permitió que la cobertura de la AUH y la Tarjeta Alimentar pasara del 55% de la Canasta Básica Alimentaria en diciembre de 2023 al 98% en agosto de 2024.
En materia de seguridad y defensa, se destaca la compra de 28 aviones para las Fuerzas Armadas, la implementación del Protocolo Antipiquetes y el Plan Bandera en Rosario, que resultó en una disminución significativa de los homicidios dolosos en la vía pública, una de las problemáticas más graves en esa ciudad.
Modernización del Estado y eficiencia
Otro de los logros que el Gobierno subraya en el marco del Presupuesto 2025 es la reestructuración del Estado, que ha buscado simplificar su funcionamiento y eliminar cargos innecesarios. Desde el inicio de la gestión, la cantidad de ministerios se redujo de 18 a 8 y las secretarías de 106 a 52, eliminando más del 50% de los cargos políticos.
Este proceso de modernización apunta a hacer un Estado más eficiente, eficaz y útil para los ciudadanos, una estrategia que continuará durante 2025 con el objetivo de mantener el equilibrio fiscal y sostener las condiciones de estabilidad económica.
El Presupuesto 2025 marca un cambio de rumbo para la administración pública argentina, apostando por la estabilidad fiscal, el crecimiento económico y el desarrollo de políticas públicas estratégicas. Con un contexto internacional desafiante, el Gobierno Nacional busca asegurar que, por segundo año consecutivo, el país no requiera financiamiento vía endeudamiento o emisión monetaria, marcando un hito en la recuperación económica tras años de desajustes fiscales.
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