Durante 2024, los Comités de Desarrollo Comunitario (CDC), integrados por vecinos de los departamentos de Iglesia y Jáchal, demostraron cómo el trabajo colaborativo puede transformar propuestas en acciones concretas para el beneficio común.
Entre los proyectos más destacados que se hicieron realidad este año se encuentran:
- La ingeniería de la red de agua potable en Malimán , una obra que garantiza acceso seguro al recurso vital.
- La construcción de un salón de usos múltiples en Angualasto , un espacio diseñado para fortalecer la interacción social y cultural.
- El equipamiento para instituciones educativas del sur de Jáchal , una iniciativa que impacta directamente en la calidad de la educación.
- La implementación de conectividad de fibra óptica en La Ciénaga , mejorando significativamente las comunicaciones y el acceso a la información en la zona.
En este contexto, Marcelo Álvarez, Director Ejecutivo de Barrick Sudamérica, destacó la importancia del enfoque participativo:
“Tenemos una meta clara: que el desarrollo de las comunidades se dé de manera colaborativa. Que los vecinos, de acuerdo con su vocación, visión e intereses diversos, sean quienes, junto a las autoridades y las empresas, direccionan la inversión que se dé con los recursos de la minería”.
Un modelo de desarrollo inclusivo.
Los CDC, respaldados por recursos provenientes de la actividad minera, funcionan como un puente entre las comunidades, las autoridades locales y el sector privado, permitiendo que las prioridades de los vecinos se conviertan en realidades tangibles.
Estos logros no solo reflejan el compromiso con el desarrollo sostenible, sino también el potencial de las comunidades para liderar sus propios procesos de transformación. La experiencia de los CDC en Iglesia y Jáchal marca un precedente para la colaboración estratégica en otros contextos.
Comentarios